Los equipos hospitalarios obsoletos y dañados presentan riesgos ambientales y legales cuando son desechados de forma inadecuada. El reciclaje adecuado, basado en la legislación vigente, permite la recuperación de materiales y la minimización de los impactos ambientales, garantizando el cumplimiento de la Política Nacional de Residuos Sólidos (Ley nº 12.305/2010) y de las normas específicas para residuos sanitarios. El artículo detalla las mejores prácticas para el manejo, transporte y reciclaje de estos equipos, incluyendo la programación de recogida de residuos electrónicos y la higienización segura de los soportes de almacenamiento, como los discos duros, disponible en eliminación segura de discos duros.
La Política Nacional de Residuos Sólidos (PNRS), instituida por la Ley nº 12.305/2010, establece directrices para la gestión de residuos, incluyendo los generados en los servicios de salud, conforme lo dispuesto en la Resolución Anvisa RDC nº 222/2018. Esta norma regula la gestión integral de los residuos en los establecimientos de salud, determinando los requisitos de segregación, acondicionamiento, recolección y disposición final ambientalmente adecuada.
Los equipos hospitalarios utilizados en procedimientos clínicos contienen componentes electrónicos y materiales que pueden presentar riesgos químicos y biológicos. Un almacenamiento inadecuado y una eliminación incorrecta pueden provocar la contaminación del medio ambiente y la exposición a agentes patógenos o sustancias tóxicas, como los metales pesados contenidos en las placas electrónicas. Por lo tanto, es esencial una gestión correcta desde el desmantelamiento hasta el reciclaje.
Antes de reciclar, los equipos deben someterse a una evaluación técnica para identificar la posibilidad de reutilización o reparación. Los equipos totalmente irreparables pasan por un proceso de desmontaje y separación de componentes, que se envían a recicladores certificados de acuerdo con los procedimientos establecidos para los residuos electrónicos. Para la retirada segura de los datos almacenados en dispositivos como discos duros, se recomienda la adopción de técnicas certificadas que garanticen la destrucción de la información sensible, tal y como recomienda la legislación de protección de datos.
El transporte de equipos hospitalarios obsoletos debe realizarse por medios que garanticen la integridad de los componentes y eviten el vertido de sustancias peligrosas. La Ley 12.305/2010 articula responsabilidades compartidas entre generadores, transportistas y recicladores, que deben actuar de acuerdo con el Sistema Nacional de Información de Gestión de Residuos Sólidos (SINIR), según lo establecido por el Decreto 10.936/2022.
Debido a la complejidad y riesgos involucrados, se recomienda que las instituciones de salud realicen programación de recolección de residuos electrónicos, apoyándose en prestadores de servicios especializados en el manejo seguro de residuos electrónicos hospitalarios. Para la destrucción de datos en soportes digitales, la eliminación segura de discos duros es fundamental para garantizar el secreto y la privacidad de la información.
La correcta gestión del reciclaje de equipamiento hospitalario obsoleto y deteriorado es un requisito legal y una práctica imprescindible para la sostenibilidad ambiental del sector sanitario. Cumplir con la normativa vigente, optimizar el proceso de eliminación mediante la programación de servicios especializados y garantizar la seguridad en la eliminación de los datos están en consonancia con las mejores prácticas de gobernanza y responsabilidad socioambiental.
La gestión de los equipos hospitalarios obsoletos y deteriorados es una exigencia legal y una práctica imprescindible para la sostenibilidad ambiental del sector sanitario.
Al elegir nuestros servicios, estás contribuyendo a un futuro más verde y limpio. Además, puede estar seguro de que sus residuos electrónicos serán eliminados adecuadamente, sin dañar el medio ambiente.
Deixe um comentário
O seu endereço de e-mail não será publicado. Campos obrigatórios são marcados com *