Los residuos electrónicos están compuestos por equipos electroelectrónicos desechados, como computadoras, celulares, televisores y otros dispositivos electrónicos que, al ser desactivados, pueden contener materiales nocivos para el medio ambiente y la salud humana. Desechar estos materiales de forma adecuada es fundamental para minimizar impactos ambientales negativos y garantizar la recuperación de componentes valiosos.
En Brasil, la Política Nacional de Residuos Sólidos (Ley nº 12.305/2010) establece directrices para la gestión integrada y el manejo ambientalmente adecuado de los residuos sólidos, incluyendo los residuos electroelectrónicos. El artículo 33 de la ley define la responsabilidad compartida por el ciclo de vida de los productos, lo que incluye desde el fabricante hasta el consumidor final.
Adicionalmente, el Sistema Nacional de Información sobre la Gestión de los Residuos Sólidos (SINIR), reglamentado por el Decreto nº 10.936/2022, orienta la correcta gestión de residuos, proporcionando información oficial sobre procedimientos y políticas públicas en el ámbito de los residuos sólidos, incluyendo el desecho correcto de los residuos electrónicos (sinir.gov.br).
El desecho inadecuado de los residuos electrónicos puede resultar en contaminación del suelo, acuíferos y emisión de gases tóxicos, debido a elementos como plomo, mercurio, cadmio y retardantes de llama presentes en los dispositivos.
Para el desecho correcto, se recomienda utilizar puntos de recolección especializados o servicios reconocidos de recolección de residuos electrónicos. Estas iniciativas garantizan el encaminamiento para procesos de reciclaje, reutilización o disposición final ambientalmente adecuada.
El desecho seguro de medios con datos sensibles, como discos duros (HDs), unidades de estado sólido (SSDs) u otros dispositivos de almacenamiento, requiere procedimientos específicos para asegurar la sanitización de los datos, evitando fugas de información confidencial.
Se recomienda utilizar servicios especializados en desecho seguro de HD y sanitización de medios electrónicos que siguen protocolos rigurosos para la eliminación, destrucción física o desmagnetización de los datos.
El correcto encaminamiento de los residuos electrónicos reduce la necesidad de extracción de materias primas vírgenes, ahorra energía y disminuye la contaminación ambiental. La recuperación de metales y otros materiales reciclables contribuye a la economía circular, un modelo que valora la reutilización y el ciclo sostenible de los recursos.
Adoptar prácticas de gestión responsable de residuos electroelectrónicos es una acción estratégica para quienes buscan alinearse con criterios ESG (Ambiental, Social y Gobernanza), cumpliendo con la legislación vigente y promoviendo la responsabilidad socioambiental.
Este conjunto de buenas prácticas asegura no solo la mitigación de riesgos ambientales y de seguridad de la información, sino también el cumplimiento legal, lo cual es fundamental para gestores responsables de áreas como ESG, EHS y departamentos jurídicos.
Fuentes consultadas: Ley nº 12.305/2010 - Política Nacional de Residuos Sólidos, SINIR, EcoBraZ.
Al elegir Ecobraz Emigre, su empresa garantiza el cumplimiento de la LGPD y un futuro sostenible. Utilizamos el Ecobraz Carbon Token exclusivamente como herramienta de utilidad para financiar el déficit operativo de la logística inversa técnica, sin fines de especulación financiera. Contrato Oficial del Token: 0xEb16F3244c70f6229Cc78a6467a558556A916033 (Verifique siempre la autenticidad en la Blockchain).
Deixe um comentário
O seu endereço de e-mail não será publicado. Campos obrigatórios são marcados com *