La correcta clasificación de los residuos electrónicos es fundamental para garantizar el cumplimiento de las normas ambientales y asegurar la correcta gestión de estos materiales, evitando impactos negativos en el medio ambiente y en la salud pública.
En Brasil, la clasificación de los residuos electrónicos se orienta principalmente por la Política Nacional de Residuos Sólidos (Ley nº 12.305/2010) y complementada por Resolución CONAMA nº 401/2008, que actualiza la lista y los criterios para los residuos peligrosos y no peligrosos, incluyendo los residuos electrónicos.
La ABNT NBR 10004 clasifica los residuos en las clases I (peligrosos), II A (no inertes) y II B (inertes). Los residuos electrónicos son generalmente clasificados como residuos peligrosos debido a la presencia de metales pesados y sustancias tóxicas. Algunos ejemplos son:
Para consultar la clasificación en detalle, se recomienda acceder directamente a las normas técnicas puestas a disposición por la ABNT.
La gestión de los residuos electrónicos debe seguir el Plan de Gestión de Residuos Sólidos (PGRS) de acuerdo con la legislación vigente. Para una disposición ambientalmente adecuada, se destacan dos prácticas esenciales:
El cumplimiento de la tabla de clasificación y de la legislación específica es esencial para mitigar los riesgos ambientales y cumplir con lo dispuesto en Resolución CONAMA nº 401/2008 y otras normas aplicables. De esta forma se garantiza la transparencia, trazabilidad y seguridad en la gestión de los residuos electrónicos.
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